ACERA DE LOS IMPARES, DEL NÚMERO 1 (BANCO BILBAO VIZCAYA) AL 37
El frío es azul
Al pie del edificio del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria, hay una escultura de Eduardo Chillida
Violeta y oro en la luz de la mañana (y no es licencia poética), el rascacielos del BBVA fue durante años el edificio más alto de Bilbao. Se construyó en 1969 como sede central del Banco de Vizcaya. Los arquitectos fueron Jaime Torres, E. Casanueva y José María Chapa, según la guía de arquitectura de Bilbao del Colegio Oficial de Arquitectos Vasconavarro (cito por la primera edición, que es de 1993). Según la misma guía, obra de Bernardo y Francisco Javier García de la Torre, la torre del BBVA tiene influencia del edificio SAS de Jacobsen, en Copenhague. Es una pena que, como suele ocurrir en Bilbao, donde siempre ha habido carestía de terreno y poca afición a conservar el patrimonio histórico, para construir este ejemplo de arquitectura racionalista se destruyó la sede anterior, que ya estaba en el número 1 de la Gran Vía desde comienzos del siglo XX.
Pegado al rascacielos del BBVA está el edificio de El Corte Inglés, que forma con el anterior un bloque de arquitectura contemporánea en nuestra Gran Vía de trazado decimonónico.
Seguimos por la acera de los portales impares y, mirando a la izquierda, tenemos una vista de la Alameda de Urquijo.
Nos acercamos a la Sala BBK, donde se desarrolla todo el año una interesante programación cultural.
Y llegamos al Palacio de la Diputación de Vizcaya. Obra del arquitecto Luis Aladrén, data de 1901, y es todavía un claro ejemplo de arquitectura del XIX. Una visita virtual.
La enorme cabeza infantil creada por el pintor y escultor Antonio López mira hacia el Palacio de la Diputación, frente al cual tiene lugar una protesta.
Una ciudad Europea como tantas, un barrio más o menos peculiar de la Gran Ciudad de Occidente, de la Gran Ciudad del Mundo.
Miramos hacia atrás para obtener una vista de la Gran vía desde las inmediaciones de la Plaza Moyúa y entramos en esta.
