jueves, 30 de diciembre de 2010

Langostinos





"No me creo que los langostinos vengan del mar. No los veo entre las olas. Me parecen seres ficticios, creaciones biológicas de las Navidades, ecuaciones rojas del capitalismo festivo."

Manuel Vilas, Langostinos

El espíritu navideño viaja en bus

ESPÍRITU NAVIDEÑO
Publicado en El Correo el 28-12-2010

Nos queda la Nochevieja. Entre Navidad y Año Nuevo, prosiguen las navidades su viaje hacia la fiesta final, la Epifanía de Jesús ante los Reyes Magos. En los países anglosajones deberían pensar seriamente en adoptar esta festividad que prolonga las vacaciones escolares y le da un último tirón al consumo navideño, perdón, al espíritu navideño. Pero ahora mismo están muy ocupados elaborando las listas de fin de año. Como aquí, donde ya hemos importado la costumbre. Los acontecimientos del año, los libros del año, los descubrimientos del año, los horrores del año, los personajes del año, los grupos musicales del año, los diez hitos políticos, las diez leyes más importantes, las diez mejores películas, las diez medidas económicas, los infinitos decálogos y enumeraciones. Entre Navidad y Nochevieja, podemos ocuparnos rastreando el año, organizando el año, simplificando el año en esas listas que, finalmente, van a parecerse siempre a la lista de la compra.

Algo hay que hacer para combatir la decepción y la resaca. Siempre por Navidad la vieja infancia intoxica el cerebro adulto y pone una pauta de espera bajo la rutina. En ese fondo, en ese cuarto trasero que no nos atrevemos ni a admitir, estábamos aguardando que sucediese algo extraordinario. No sé, la paz mundial, el acuerdo climático definitivo; o que de pronto se respetaran los derechos humanos en este planeta o que se encontrara la puerta a otro Universo. Una vez más, nada ha sucedido y si ha sucedido, no nos hemos enterado.

Pero esto es sólo una forma de ver, es la botella medio vacía. También se puede decir que todo ha sucedido de nuevo. Han vuelto a casa por Navidad los ausentes y las ausencias, los cineastas y los jóvenes científicos. Estos, reunidos en Madrid en las Jornadas de jóvenes post-doc en el extranjero probablemente volverán a marcharse enseguida. Las familias se reúnen y se parten. Los timadores y los ladrones aprovechan el espíritu de las fiestas para trabajar con denuedo y hacemos el balance de las mujeres asesinadas por sus tiranos privados. Perdón. Creo que me estoy deslizando otra vez hacia la parte vacía o negra de la botella mediada. Mi amigo Javier Otaola, laicista declarado, decía ayer en este periódico que, aunque para él la Navidad es una fiesta cristiana, felizmente no es sólo eso, sino que se ha secularizado, se ha mezclado con la celebración de Fin de Año y puede ser compartida por toda la sociedad civil. Y que la Navidad, para quien quiera verlo, conserva y celebra un valor complementario de la libertad: la piedad, un sentimiento de raíz religiosa previo a cualquier confesionalidad que se manifiesta como asombro y emoción ante lo absolutamente Otro. Quedémonos con esta idea. Y con la idea de que todo ha sucedido, una vez más, y mientras todo suceda, seguimos nuestro viaje común a donde ustedes quieran.

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Cuentos de Navidad y cuentos de Año Nuevo

(Versión para la Red)
María Maizkurrena

El cuento de Navidad por excelencia es el de Charles Dickens, no sólo por la bondad de la obra y su popularidad, sino por la potencia de la industria audiovisual anglosajona, que ha inundado de versiones el mundo. Un pueblo que no esté mayoritariamente alfabetizado, uno que se haya alfabetizado tarde (mucho después de que la imprenta, los libelos y los periódicos dieran lugar a los primeros medios de comunicación de masas), esa parte del pueblo que no ha llegado a la lectura aunque haya aprendido las letras en la escuela, conoce la obra de Dickens por sus efectos en las diferentes pantallas. Una parte de la humanidad ha pasado directamente de la literatura oral a las pantallas.
Mi hija de cinco años ya tiene noticia del Cuento de Navidad, aunque para ella Mister Scrooge sea el pato Donald (o el tío Gilito, no recuerdo) doblado al español. ¿Quién no ha visto una de las muchas películas basadas en el Christmas Carol de Dickens que nosotros traducimos como Cuento de Navidad, aunque no sepa que se llaman así la obra ni el escritor? Los fantasmas atacan al jefe es una adaptación para el cine hecha en EE.UU. en 1988 que no he visto ni quiero ver y que, en su versión original, se titula Scrooged. Los personajes del relato dickensiano son figuras universales de la cultura mundial y su cuento o villancico navideño es la Navidad misma (junto con Qué bello es vivir, la película de Frank Capra).
Dickens combinaba el aviso moral con el triunfo complaciente de los buenos sentimientos, la denuncia de las injusticias y lacras sociales con los paños calientes. Dickens no nos amarga las Navidades, pues en su relato el espíritu navideño nos redime de la dureza de nuestro corazón. ¿Qué puede ofrecer la literatura escrita en español para competir con esto? ¿Tal vez algo de Clarín? Leopoldo Alas, Clarín, fue, como Dickens, escritor y periodista, o escritor de periódicos, además de autor de cuentos y novelas, pero Dickens tenía 40 años cuando nació Clarín y Clarín no había cumplido los 20 cuando murió Dickens. Clarín escribió un cuento que se titula Pipá y que el lector curioso puede leer en www,cervantesvirtual.com/bib_autor/Clarin.
Sin embargo, el relato invernal de Clarín no nos sirve como cuento navideño. Para nada. No se le puede poner un lazo rojo y venderlo con el merchandising propio de estas fechas. El relato de Clarín, me temo, tiene un final de novela naturalista, un final atroz. Ya lo dice el propio Clarín: “fue Pipá un gran problema que nadie resolvió”. ¿Quién quiere oír de problemas irresueltos? Es mejor calentarse las manos en el fuego del hogar. Hace frío ahí fuera.

Terminé de escribir lo anterior y me fui a comprobar qué estaba viendo mi hija en Clan, el canal infantil de TVE. Descubrí, cómo no, que estaba absorta en una versión para adolescentes del Cuento de Navidad, versión en la cual el Sr. Scrooge había sido sustituido por una joven millonaria cuyo corazón era tan duro como el del avaricioso y solitario viejo. A la chica se le aparecían el fantasma de las navidades pasadas, el de las navidades presentes y el de las navidades futuras y, claro, se le derretía el hielo de su frío corazón.
La fantasía de Dickens es una fábula cristiana. En ella la salvación es individual y aunque sepamos que, si un sólo señor Scrooge cambiase, el mundo seguiría lleno de toneladas de señores Scrooge, al menos nos conforta este triunfo del bien con que se nos compensa tras haber contemplado la argamasa de crueldad que rellena los desniveles de la sociedad humana. Siempre que leo el cuento o veo alguna de sus variantes (los medios audiovisuales se parecen a la literatura del Medievo, que reescribía y traducía y llevaba de un sitio a otro unas mismas fuentes) me acuerdo (ya lo he dicho) de Pipá, el cuento de Clarín donde el chico del arroyo tiene la oportunidad de salvarse pero la rechaza, porque no puede verla y, por tanto, no puede elegirla. Esto es la contra Navidad, la anti Navidad. Medicina amarga.
Ahora lo que necesitamos es engañarnos con los cuentos de Año Nuevo, los cuentos en los que nos prometemos que vamos a ser mejores y que lo vamos a hacer mejor. Están en ello los partidos políticos. Nos prometen que harán más, ya que no mejor, pues no pueden admitir que alguna vez se salieran de la perfección. Ha sido muy comentada la página web de Mariano Rajoy, sobre todo por ese despacho virtual donde ¿conocemos? sus gustos. Sólo tres libros destacados en la biblioteca de Don Mariano, y uno es La Catedral del Mar, best seller del tiempo que suelo abrir por juego cuando visito ciertos grandes almacenes y, cada vez, me regala una frase mal escrita. ¿O es Carlos Ruiz Zafón el que me regala frases fabulosamente incorrectas? No lo recuerdo. Todos me parecen iguales. ¿Miente Rajoy o, peor aún, es sincero? ¿Es bueno que un aspirante a presidente del Gobierno lea a Ildefonso Falcones en lugar de leer, no sé, a Elías Canetti, a Octavio Paz o a San Agustín? ¿Es bueno que los líderes políticos quieran ser tan como todo el mundo, tan como la inmensa mayoría a la que no ha llegado Blas de Otero pero sí Ildefonso Falcones? ¿Quién le escribe a Mariano Rajoy sus cuentos de Año Nuevo?

Bilbao, Navidades de 2007

Artículos publicados en prensa, 2009






SALA DE ESPERA 2009






(Spanish)

lunes, 27 de diciembre de 2010

ALEX DE LA IGLESIA ES DE BILBAO

Este año, y especialmente este fin de año, se diría que Alex de la Iglesia está en todas partes. Está en la tele y en la radio y en los aeropuertos y en los diarios y en las revistas. No sólo es presidente de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, un cargo que tiene que pesar mucho a juzgar por la longitud del nombre de la institución, sino que le toca promocionar su película Balada Triste de Trompeta. Por Navidad ha vuelto a Bilbao y a la portada del diario El Correo. Ya estuvo en las páginas de El Correo y en Bilbao cuando acudió al Gutun Zuria, el festival literario de la Alhóndiga, ese centro cultural superchachi que nos ha salido a los bilbainos ahí donde había un almacén de vinos abandonado. No sé si nos lo merecemos. Cuando Alex de la Iglesia pasó por allí en el mes de octubre, M.M. escribió lo siguiente (o algo parecido) en el diario El Correo :


Vuelve Álex de la Iglesia en su año triunfal, su año nada horrible. Vuelve a Bilbao. Con menos kilos de los que estorban y más kilos de los que cuentan, con un león de plata, un premio nacional de cinematografía, una balada triste de trompeta y alguna medalla o alguna herida ganadas en el programa de Boris Izaguirre. Yo me alegro de que Álex venga por aquí para recordarnos que se puede vivir lejos de Bilbao, que hay otros mundos además de Bilbao, y que, en esos mundos, un bilbaíno puede ser director de cine y, encima, tener éxito. Como nadie es profeta en su tierra, nada mejor que irse para que luego te reconozcan en ella cuando ya has aprendido a ser también de otras partes. Me alegra que nos visite Álex, cuya partida a Madrid y a los otros Bilbaos del planeta es también la marcha de todos los que nunca nos marchamos, y espero que Juan Bas le invite al festival de literaturas de humor del año que viene. Yo, por mi parte, debo decir que cada año celebro las fiestas de Bilbao releyendo uno o varios capítulos de 'Payasos en la lavadora', la novela que Álex dedicó a 'su' Bilbao, que es el de toda una generación (la suya, la mía). «Soy un poco payaso, y los payasos siempre dicen la verdad», dicen que dijo en San Sebastián el mes pasado. Esperamos verle más por aquí, ahora que Bilbao empieza a formar parte de esa triple capital cultural vasca que soñó Bernardo Atxaga, alias José Irazu, porque Bilbao ha visto crecer su tejido cultural en poco tiempo de una manera que nos hace sospechar que “mamá”, la araña gigante que nos dejó Louise Bourgeois junto al museo Guggenheim, por las noches, cuando la nadie la ve, hace un trabajo tremendo de tejedora. Por lo que a mi respecta, seguiré leyendo cada mes de agosto 'Payasos en la lavadora', la novela de humor que a veces (¿porqué será?) me da unas ganas terribles de llorar.

ENLACES

Entrevista en El Correo
Noticia en El Correo, sección de cultura: Alex de la Iglesia y la ley Sinde
Alex de la Iglesia en la última edición de Gutun Zuria
Premio nacional de cinematografía
En Venecia
Carlos Boyero habla sobre Alex en El País
Alex y los premios Goya
Alex y Carolina Bang

Revelación















¿Qué es esto? ¿Un cuadro de Tapies? ¿Un trozo de pared? ¿Una obra de arte? ¿Una fotografía?
¿Qué contiene? ¿De qué está hecho? ¿Quién lo ha hecho? ¿El azar? ¿Uno que pasaba por allí? ¿Muchos que pasaron por allí? ¿El ojo de la cámara?
Diversas respuestas nombran parcelas diferentes de conocimiento y desconocimiento.

What on earth is this? A painting by Tápies? A broken wall? A piece of somethig? Is it a work of Art? A photograph?
What's in it? What is it made of? Who made it? Was it made by chance? By someone who just passed by? By lots of people passing by? By the eye of the camera?
Different answers name different sides of knowledge and ignorance.

Artículo de 21.12.10 en el Diario El Correo - Nombres

lunes, 22 de noviembre de 2010

La luna de Fito Cabrales



Es poco lo que tengo,

el oro de mi tiempo
,
la flor de mis neuronas

y por supuesto la luna.



–Adolfo Cabrales Mato, "Fito"–



Haz clic en la imagen para enlazar con la página web de FITO & FITIPALDIS

FITO ES DE BILBAO

Niño de metal

El niño de metal que está sentado detrás del pabellón de La Casilla se vuelve geometría cuando está de perfil. De perfil, su color es el azul y la criatura que sostiene en las manos se ve mejor.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Estatuas en La Prolongacion (Gran Vía de Bilbao)


We find several statues along this part of the Main Street which used to be called La Prolongación.

These are the ones we can see while walking on the right path as we go towards The Sacred Heart Plaza (the left path if we walk towards Plaza Moyua).

A bust of poet Ramón de Basterra

Busto del poeta Ramón de Basterra en una de las entradas al parque desde la Gran Vía.







"Reading", by Joaquín Lucarini Macazaga

"Leyendo", de Joaquín Lucarini Macazaga

All the statues on the facades in this part of the city also belong to Joaquín Lucarini Macazaga

sábado, 20 de noviembre de 2010

La Prolongación - A walk along the right (left?) path of this part of the Gran Via




La plaza del Sagrado Corazón es el final de la Gran Vía, pero puede ser también, claro, el comienzo de un paseo. La parte de la Gran Vía que queda entre esta plaza y la de Federico Moyúa se conoce como La Prolongación, debido a que, originalmente, la avenida principal de Bilbao se extendía entre la Plaza de España o Plaza Circular y la Plaza Moyúa. La Prolongación se construyó en los años veinte y treinta del siglo XX. La mayoría de los edificios de su lado derecho (según vamos de la plaza Moyúa a la del Sagrado Corazón), lado izquierdo en nuestro recorrido, pertenecen a esa época.


The Sacred Heart Plaza is the end of the Gran Via, but of course it can be the beggining of a walk. The part of the Gran Via or Main Street between this Square or Plaza and the Federico Moyúa Plaza is known as The Prolongation. Until the twenties of the past Century it was called Avenue of the Allies and most of the grounds at both sides of the Road were stil empty. Now we shall pay attention to the right path of The Prolongation, which is the right path coming from Moyua Plaza towards the Sacred Heart, but is the left hand from the point of view of our route.



Houses in the left corner of the Plaza of the Sacred Heart, as we enter the Gran Via from this point to go to the right, towards Moyua Plaza.






 



Casa Lezama-Leguizamon, 1921, obra de Ricardo Bastida.

Lezama-Leguizamon Houses, from 1921. The arquitecht was Ricardo Bastida.






 Arquitects Eugenio María Aguinaga, Hilario Imaz and German Aguirre
were authors of this building, constructed in 1957.










 This in an example of the simple and beautiful racionalist architecture which sometimes was made in the same years that saw the raising of the most ornamented houses created for the wealthy classes. Ejemplo de la arquitctura racionalista que en ocasiones se hacía por los mismos años en que se levantaban las palaciegas y ornamentadas casas de la alta burguesía, como las que hemos visto en Gran Via 58.





Edificio de 1927, obra del arquitecto Angel Líbano.
A building designed by arquitect Angel Libano. It was finished in 1927.





jueves, 18 de noviembre de 2010

Patchwork

Esto es lo que hacen los árboles en otoño.

This is what trees do in Autumn.
Art of the fallen leaves.

Arte de las hojas caídas.



















Los arces. The maple trees.
















Los tilos. The lime trees.

Otoño en Bilbao

miércoles, 10 de noviembre de 2010

The Bilbao Song




Please, come into the Mudcat Cafe, which is not in Bilbao, but in the Internet, to know about the BILBAO SONG

But wait, you don't need to go there to start reading...


THE BILBAO SONG

That old Bilbao moon, I won't forget it soon
That old Bilbao moon, just like a big balloon
That old Bilbao moon would rise above the dune
While Tony's Beach Saloon rocked with an old-time tune
We'd sing a song the whole night long and I can still recall
Those were the greatest (those were the greatest)
Those were the greatest (those were the greatest)
Those were the greatest nights of them all

No paint was on the door (no paint was on the door)
The grass grew through the floor (the grass grew through the floor)
Of Tony's Two By Four (of Tony's Two By Four)
On the Bilbao shore (on the Bilbao shore)
But there were friends galore (howdy do, howdy do)
And there was beer to pour (chug-a-lug, chug-a-lug)
And moonlight on the shore (and the moon shines above)
That old Bilbao shore (on the shore, not the floor)
We'd sing all night with all our might and I can still recall
Those were the greatest (those were the greatest)
Those were the greatest (those were the greatest)
Those were the greatest nights of them all

Those old Bilbao guys, They loved to harmonize,
Who stopped to realize How fast the summer flies!
The moon was on the rise, We'd catch the ladies' eyes
And whisper Spanish lies, They never did get wise.
We'd sing a song the whole night long and I can still recall
Those were the greatest
Those were the greatest
Those were the greatest nights of them all

That old Bilbao moon, I won't forget it soon
That old Bilbao moon, just like a big balloon
That old Bilbao moon would rise above the dune
While Tony's Beach Saloon rocked with an old-time tune
We'd sing all night with all our might and I can still recall
Those were the greatest (those were the greatest)
Those were the greatest (those were the greatest)
Those were the greatest nights of them all


Transcribed by Ronald E. Hontz

Original Lyrics and Music by Bertolt Brecht and Kurt Weill in the 1929 German musical "Happy End." Johnny Mercer added new lyrics.
(Title is often mistaken to be "Bill Bower Moon"). Bilbao is a city on the Bay of Biscay on the north coast of Spain.


BILBAO SONG (Happy End)
Sung by Marianne Faithful

Bill's beer hall in Bilbao, Bilbao, Bilbao,
Was the most fantastic place I've ever known;
For just a dollar you'd get all you wanted,
All you wanted, all you wanted,
Of whatever kind of joy you called your own,
But if you had been around to see the fun,
Well, I don't know, you might not like what you'd've seen;
The stools at the bar were damp with rye,
On the dance floor the grass grew high,
Through the roof the moon was shining green
And the music really gave you some return on what you paid.

That old Bilbao
Down where we used to go
Da da da da da...
I can't remember the words,
Da da da da da da
It was so long ago.
I don't know if it would have brought you joy or grief, but
It was fantastic
It was fantastic
It was fantastic
Beyond belief.

Bill's beer hall in Bilbao, Bilbao, Bilbao,
Came a day the end of May in 1908,
Four guys from Bristol came with sacks of coal dust,
Sacks of coal dust, sacks of coal dust,
And the time they showed us was really great,
But if you had ben around to see the fun,
Well, I don't know, you might not like what you'd've seen,
The brandy bottles smashing through the air
And the chairs flying everywhere,
Through the roof the moon's still shining green,
*And those fog eyes all going crazy with their pistols blazing high;
Think you can stop 'em? Well, go ahead and try!

That ol' Bilbao
Down where we used to go,
Casting its golden glow;
That ol' Bilbao,
Why does it haunt me so?
I don't know if it would have brought you joy or grief, but
It was fantastic
It was fantastic
It was fantastic
Beyond belief.

Bill's beer hall in Bilbao, Bilbao, Bilbao,
Now they've cleaned it up and made it middle class
With potted palms and aspree;
Very bourgeois, very bourgeois,
Just another place to put your ass,
But if you could come round to see the fun,
Well, I don't know, you might not find it such a strain,
Ha, they've cleaned up all the booze and broken glass,
On parquet floors you can't grow grass,
They've shut the green moon out because of rain
And the music makes you cringe now when you think of what you paid.
Hey Joe, play that ol' song they always played-
That ol' Bilbao
Casting its golden glow,
That ol' Bilbao moon,
Love never laid me low.
That ol' Bilbao,
Why does it **hurt me so?
I don't know if it would have brought you joy or grief, but
It was fantastic
It was fantastic
It was fantastic
Beyond belief.
So long ago.

The Brecht-Weill song, as sung in "September Songs, Music of Kurt Weill," cover by Marianne Faithfull, and originally sung on Broadway, in "Happy End," 1929. Lotte Lenya recorded it in 1930.


From THE MUDCAT CAFE

Go there if you can read the original lyrics in German
and also to get more information on the English versions

martes, 2 de noviembre de 2010

Día de difuntos

All
Souls
















El día de difuntos, los carritos de los vendedores de castañas asadas se convierten en calaveras.

María Maizkurrena: Los difuntos
El Correo, 02.11.2010

lunes, 1 de noviembre de 2010

La paz sea con los muertos
















NOVIEMBRE, LA PAZ SEA CON LOS MUERTOS
MAY THE DEAD HAVE PEACE
Un buen día para empezar un blog